¡Hola a tod@s!
Como todos los lunes, os traigo un look, y esta vez de mis favoritos :)
En este invierno, las noches en las que he salido y he querido hacer un maquillaje llamativo, he recurrido casi siempre al plateado con transiciones rojizas o anaranjadas. Es una combinación que me encanta y me siento muy favorecida con ella.
Lo cierto es que es un look muy elaborado, que requiere mucha paciencia, pues los colores de transición son prácticamente opuestos a los de la sombra principal. Los pasos que suelo seguir para realizarlo de forma que los colores queden bien integrados son:
1. Aplico en la cuenca una sombra anaranjada o rojiza, dependiendo de lo que me apetezca, lo que lleve puesto de ropa o el labial que vaya a utilizar (suelo usar el tono de labios a juego con la sombra que utilice para esto). En esta ocasión, he mezclado una sombra roja con otra naranja (ambas mates).
2. Por todo el párpado móvil, aplico una sombra plateada metalizada.
3. Intensifico la transición rojiza.
4. Entre el tono rojizo y el plateado y más bien en el exterior del párpado, aplico una sombra gris oscura mate, para que el degradado quede mejor y la cuenca se vea más intensa.
5. Delineado.
El toque final: colorete y labios del mismo tono que la cuenca. :)
¿Qué os parece?
¡Me despido! Como siempre, para cualquier cosa, ¡dejad un comentario!
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